Navegar en la era del vacío —como llama sombríamente Lipovetsky a nuestro tiempo— nos ha dado un sentido y una energía especiales como empresa de comunicación estratégica para el cambio social pionera en América Latina.
En marzo de 2020, cuando estábamos por cumplir 18 años, llegó la pandemia por Covid 19. Más perplejxs que aterradxs, avanzamos firme, nutriendo eso que mejor sabemos hacer: acompañar a iniciativas de cambio social latinoamericanas en su comunicación estratégica, con métodos, enfoques, recursos y procesos para fortalecer sus capacidades de incidencia.
Seguimos preguntándonos cómo es que hemos tenido tanta fortuna, aunque sabemos que ha sido posible principalmente por la generosidad, confianza y profesionalismo de tales iniciativas y sus equipos de trabajo. Todo ha sido aprender y crecer juntes.
Aun con ese poderoso impulso, ahora se nos revela en un destello la partida de 2023 y la contradictoria expectativa del nuevo año, tomándonos, una vez más, cambiando: en septiembre iniciamos emocionades la renovación integral de nuestras metodologías, enfoques y sistemas, para emprender 2024 así, tan maduros y al mismo tiempo tan joviales.
La región ha transitado hacia escenarios sociales y políticos desalentadores, lo cual está teniendo efectos severos no solo en el ánimo, sino en la capacidad resiliente y la permanencia misma de miles de organizaciones y pequeñas empresas sociales empeñadas en mejorar a sus comunidades en la región, nosotrxs incluidxs.
No nos es posible predecirlo todo, pero como equipo y como personas seguiremos desafiando los mecanismos de control social, esforzándonos por contribuir en la construcción de un mundo más vivible, para lo cual necesitamos seguir teniendo la confianza de las decenas de organizaciones que nos han permitido nutrir sus estrategias comunicacionales.
Hoy aprovechamos para expresarles nuestra mayor gratitud y los mejores deseos de cambio social positivo en 2024. ¡Felices fiestas!
